La contaminación lumínica es uno de los factores de contaminación urbanos más apreciables. Hoy ha salido en los diarios españoles la foto desde el espacio con el mensaje de «Hola Madrid», en la foto que podéis ver aquí, se aprecia la luz que desprende la capital española y que es apreciable desde el espacio.
Sumado a la cantidad de recursos desperdiciados, uno al ver esta foto se pregunta cuánta energía estamos malgastando en la iluminación de nuestras ciudades, tanta que es visible desde fuera de nuestro planeta. Los factores están estudiados: daño a los ecosistemas nocturnos, consecuencias negativas directas en la salud, dificultad en el tráfico aéreo y marítimo… Cualquier recurso ineficiente es perjudicial de por si, pero en este caso ese despilfarro afecta a otros factores que los propiamente económicos.
Existen ya en la actualidad iniciativas para corregir este impacto negativo en nuestras ciudades, la mayoría se centran en el uso eficiente de los sistemas de iluminación. El objetivo es que cada vez sean más inteligentes, únicamente operando en periodos de actividad y con un enfoque más preciso sin iluminar zonas inútiles. Este es un pequeño desafío que se engloba en la cada vez más necesaria conciencia de eficiencia energética o de ahorro energético.
ECONOMÍA ECOLÓGICA 